domingo, 29 de junio de 2014

X-M-C

"Tengo una foto tuya en mi habitación,

espero que nunca se caiga,

espero nunca perder este sentimiento,

que solía tener cuando llamabas,

y me pregunto a mi misma,

¿Quien eras?

¿Donde estas?

¿Estuviste aquí después de todo?"

"Todo el mundo tiene un punto en su vida donde se encuentra con un cruce de caminos y tiene un montón de días malos. Hay diferentes maneras de lidiar con ellos y la forma en que yo me ocupe de eso fue volviéndome por completo hacia la Música"  

Taylor Alison Swift






miércoles, 25 de junio de 2014

Cuaderno Viejo

"No puedo creerlo. Simplemente no se como pasó. El destino quería que yo tuviese el peor día de mi vida y así fue. La cosa era salir y despejarme con mis tías, pasando un buen rato. De todas las personas en el mundo a las que hubiera querido haberme cruzado aparece ELLA. SI, otra vez, Valeria. No puedo creer como llegamos a esto. Me duele tanto no ser más su amiga que me produce todo: bronca, tristeza, odio, ganas de largarme a llorar en pleno shooping. No me importa nada, no quería verla. Me pone demasiado mal que no quiera solucionar las cosas hablando y que decida terminar todo así como si nada.
Yo quise disimular mi cara de orto, pero me fue imposible. En 5 segundos ya tenía cara de orto y muchas ganas de llorar. Estaba esperando a que mis hermanas volviesen de comprar comida con mi tía sentadas en una mesa al fondo. Mi Tia me preguntó que me pasaba, pero no le respondí. Se dió vuelta para tratar de adivinar a quien estaba mirando, y estaba Valeria en esa dirección. "¿Esa chica te pone mal? Ay nena, no tenes que hacerte problema, ¿Que les pasó?". No me quedó otra opción que contarle todo para que ella entendiera. Aún así, me largué a llorar. Fui al baño lo más rápido que pude a lavarme la cara, me encerré a llorar como una nena de 5 años a la que acababan de retar.
En ese momento tuve un deja vú horrible. Cuando estaba en 4to Grado, yo tenía una amiga, Malena, que se llamaba Malena. Un día vino y me dijo que no quería ser más mi amiga y yo me fui al baño a llorar. Estuve ahí toda la tarde hasta que se hizo la hora de irse. No fui a clases y tampoco hice la formación. Cuando llegué a casa me encerré en mi pieza y no salí ni siquiera para comer. Resultó que Malena me había hecho una broma y que estuvo esperando que yo subiese al salón para pedirme perdón. Es hasta el día de hoy que seguimos siendo amigas.
Bueno, volviendo al día de hoy. Esto no era una broma, estaba pasando en serio. Estando en el baño, le mandé un mensaje a mi amiga Celeste y le conté lo que me estaba pasando. Celeste y Valeria se odian y por eso no tardó mucho en empezar a decirme "Te lo dije". Empezó a decirme cosas horrorosas de ella y mi furia se incrementaba de a poco. La odio, muchísimo. Quería ir y gritarle en la cara todo lo que pensaba. No quería tener nada mas que ver con ella y que terminase.
Cuando llegué a casa, Celeste había creado un grupo en WhatsApp llamado "La pelota Naranja" donde, junto a mis hermanas, estaban bardeando a Valeria. En ese momento no hablé. Solamente leía lo que escribían. Me sentía contenida y, ahora, me siento una mierda. Yo puteo a cualquiera que la llama gorda a Valeria y ahora no hago nada al respecto. Pasaron un par de horas y seguía leyendo, tanto por twitter como por wpp. Era imposible no sentirme mal, todavía había una parte de mi que no quería soltarla. 
Después de comer, abrí twitter y ella escribió "Imposible no sentirme así de mal". Lo interpreté muy personal y todo mi odio se convirtió en un abismo de culpa, porque todo lo que habia dicho y hecho. No puedo evitarlo, ella me sigue importando, aunque no nos hablemos más. No puedo negar mi odio. Me odio a mi por haber hecho lo que hice. Me odio por quererte tanto y valorarte tan poco, cuando tendría que ser la primera en hacerte saber lo mucho que vales. Perdon Vale" Algún sábado de Abril, 2013

Encontré esto en un cuaderno viejo que creía que lo había desecho hace varios meses. Recuerdo este día como si hubiese pasado hace poco. Tal como lo describí, la odiaba. No quería verla. Acudí a Celeste para descargar mi odio y es hasta el día de hoy que me arrepiento con toda mi razón.
Es el día de hoy que Celeste se convirtió en alguien a quien no quiero ver y se que ella tampoco quiere verme.Creo que es lo que tiene que ser y que, además, ya no somos amigas por diferencias de opiniones.
En cambio, con Valeria es distinto. A pesar de todos los errores, algo hizo que nos volvamos a dar una segunda oportunidad. Ahora ella es mi hermana mayor, la que siempre quise tener, y no cambiaría eso por nada. 
Lo malo de leer cosas viejas es que se me hace un nudo en el estómago por la culpa y el remordimiento pero, aún así, me sirven para darme cuanta de algo: las cosas cambian, para bien o para mal. Pero aprendí y me sirvió para tener una idea permanente: No quiero perder a Valeria nunca más 

jueves, 19 de junio de 2014

Hoy Te despido

Recuerdo cuando yo lloraba,
y vos venías para alegrarme.
En mis pies te recostabas
para que yo te acariciase.

Eras la única que lloraba
cuando yo me iba de casa
y la única que festejaba
cuando me escuchaba volver.

Ahora no estás
y siento tu falta.
Aún puedo escucharte
como cuando me iba a levantar.

Fuiste los mejores
cuatro años de mi vida.
No habrá ni un día
en el que no te vaya a recordar.



Eras mi mejor amiga,
la que nunca me iba a fallar.
Para todos, solo un perro.
Para mí, mucho más.


Nadie va a reemplazarte
aunque el tiempo vaya a pasar.
Estarás conmigo siempre
y nos volveremos a encontrar.

Esas noches de lluvia
cuando me ponía a estudiar
vos estabas conmigo
mirándome delirar.

Todavía te imagino
con la cabeza en la ventana,
pidiéndome que te alimente
o que te vaya a dar amor.

Todavía siento el dolor
cuando veía que te retaban.
todavía siento como respirabas
durmiendo junto a mi. 

Pero lo que mas lamento fue
sin dudas existentes.
No haberte podido despedir
tal como y te lo mereces. 



Ahora te dedico estas lineas
a mi gran compañera incondicional
Julieta, querida amiga
Saltando en las nubes te voy a encontrar.

"Dale tu corazón
y el suyo te dará"
Nunca sabrás lo que es el amor
hasta que a un perro aprendas a amar

Hasta siempre saltamontes,
hasta siempre mula de carga.
Ojalá me recuerdes siempre.
Con vos se ilumino mi alma.

sábado, 7 de junio de 2014


"No puedo hablar de nuestra historia de amor, así que hablaré de matemáticas. No soy matemática, pero de algo estoy segura: entre el 0 y el 1 hay infinitos números. Están el 0,1, el 0,12, el 0,112 y toda una infinita colección de otros números. Por supuesto, entre el 0 y el 2 también hay una serie de números infinita, pero mayor, y entre el 0 y un millón. Hay infinitos más grandes que otros. Nos lo enseñó un escritor que nos gustaba. En estos días, a menudo siento que me fastidia que mi serie infinita sea tan breve. Quiero más números de los que seguramente obtendré, y quiero más números para Augustus de los que obtuvo. Pero, Gus, amor mío, no puedo expresar lo mucho que te agradezco nuestro pequeño infinito. No lo cambiaría por el mundo entero. Me has dado una eternidad en esos días contados, y te doy las gracias. "


viernes, 6 de junio de 2014

MALEFICA

Hubo una vez, un hada. Era la más fuerte de todo el territorio del Páramo y su protectora. Sus alas eran tan majestuosas y elegantes que podía arrastrarlas al caminar. Su nombre, era Maléfica. Un día, un niño llamado Estefan le hizo creer que estaba enamorado de ella y, al cumplir los dieciséis años, le hizo un regalo: le dio un beso de amor verdadero. Resultó ser que no fue así. La ambición y el vicio humano por obtenerlo todo, llevó a Estefan a cometer el peor de sus actos: le cortó sus alas para entregarlas al parlamento y así convertirse en rey. 
Maléfica despertó y sus alas ya no estaban. Con un llanto de dolor, se puso de pié y dejó que su odio y deseo de venganza se apoderaran de ella. Se convirtió, entonces, en el ser más temido de todo el Páramo y la tierra del reino. Creó un muro impenetrable para que los soldados del rey no pudieran ingresar a robar sus tesoros. Todas las criaturas se rendían ante su poder. 
Con la ayuda de su leal sirviente Di Aval, un cuervo al que le había salvado la vida, espió al rey y a todo lo que pasaba en el castillo. Maléfica le dió solo una orden que siempre debía cumplir "Necesito que seas mis alas". 
La reina dio a luz a una bebé a la que llamó Aurora. Todo el reino se levantó y asistió a la celebración en su honor pero, como era de esperarse, Maléfica no había sido invitada. No iba a quedarse fuera de la fiesta, así que le quiso dar una sorpresa al rey Estefan, y se apareció en el salón principal. Usualmente, las hadas les ofrecían dones espirituales a los bebés recién nacidos. Maléfica planeó hacer lo mismo. Le aplicó un hechizo, el cual consistió en que al cumplir los dieciséis años se pincharía el dedo con la aguja de una rueca y caería en un sueño eterno para siempre. El Rey Estefan imploró por su perdón de rodillas y Maléfica decidió que ese hechizo tuviera una solución, pero con algo imposible de conseguir. La única forma de romper el hechizo sería con un beso de amor verdadero. Ese hechizo duraría hasta el fin de los tiempos. Luego de eso, Maléfica desapareció.
El Rey mandó a quemar todas las ruecas y a ocultarlas en los calabozos del reino. Ese mismo día, le encomendó a sus tres hadas madrinas que ocultaran a Aurora en la cabaña del bosque hasta el día después de su cumpleaños número dieciséis.
Se preguntaran ¿Por qué estoy contando la historia de La Bella Durmiente? En realidad, esta historia es similar pero no como muchos la han contado. Una vez que Aurora había  sido trasladada por sus "tias" a la cabaña, se hubiera muerto, pero Maléfica siempre estuvo ahí, cuidándola, salvandola cuando se iba a caer y siempre presente. A pesar de su odio y de su constante deseo de que ella no sobreviviera, la vió crecer. Aurora iba creciendo y se veía muy interesada por descubrir que había más allá de los muros. Maléfica permitió que Aurora ingresara al Páramo pero no le dijo quién era. Al principio se ocultó entre las sombras porque Aurora podría asustarse y huir de ella. Ella creyó que era su hada madrina y, sus sospechas por confirmar si alguien la vigilaba desde pequeña, se dieron por ciertas. Durante los siguientes días, Maléfica le enseñó todo sobre el Páramo y, se dió cuenta de la belleza y la pureza que si don le había otorgado a Aurora. Criatura que la conocía, se quedaba encantada por ella y si personalidad bondadosa. 
Sin planearlo, Maléfica desarrolló un cariño muy grande por Aurora y no quería condenarla a lo que su odio por Estefan la había destinado. Una noche, cuando Aurora estaba durmiendo, penetró en su habitación e intentó quitarle el hechizo. Pero, como ella bien dijo "Perdurará hasta el final de los tiempos y nada ni nadie podrá romperlo". Las consecuencias de la venganza y el odio llevaron a Maléfica al arrepentimiento y a la culpa. Aurora también la quería y le pidió que, al cumplir sus dieciséis años, le permitiera vivir en el Páramo con ella. Para mantenerla a salvo, accedió. 
Cuando las cosas no podrían ponerse peores, las tres hadas le confesaron a Aurora que era la hija del Rey Estefan y de la maldición a la que fue condenada cuando era una bebé. Para su suerte, Maléfica no tuvo más remedio que admitirlo, aunque solo quería su bien. Aurora escapó hacia el castillo y se presentó frente a su padre, quién ordenó su encierro para mantenerla a salvo durante la batalla. 
Maléfica sabría qeu no iban a poder impedir que caiga bajo el hechizo, así que intentó buscar lo más parecido a un beso de amor verdadero que pudo conseguir: Un príncipe con quién Aurora se había encontrado un día en el bosque. Su nombre, era Phillip. Atardecía y no quedaba tiempo, unos susurros inundaron los oídos de Aurora, conduciéndola hacia los calabosos. Maléfica había convertido a Di Aval en Corsel, y estaba rumbo al castillo junto al príncipe Phillip. Ya era tarde. Una rueca había hecho que Aurora se pinchara el dedo, y cayera en su sueño de muerte. Aún así, Maléfica se introdujo en el castillo para intentar salvarla. Para su mala suerte, cuando Phillip por fin le dió un beso de "amor verdadero", el hechizo no funcionó. No lo sentía, estaba claro que ese tipo de magia no existía. Aurora seguía dormida. 
Maléfica, triste y arrepentida, viendo el rostro dormido de aquella chica a la que le había descargado todo su odio, su ira y deseo de venganza, solamente por querer hacerle daño a su padre, estaba muerta.
[...]"Mírate, allí, tu eres la bestia que ha logrado lo que nunca nadie ha hecho. Me has robado el corazón. Nadie podrá lastimarte mientras yo esté viva y no habrá un día en el que no recuerde tu sonrisa" dijo, mientras las lágrimas caían de sus ojos y le dió un beso en la frente. Para su sorpresa y la de Diaval, Aurora despertó. Maléfica así pudo darse cuenta que no hubo amor más verdadero del que ella sentía por Aurora, cuidándola y protegiéndola todos esos años. "Hola Bestia" le dijo, mientras una sonrisa y llanto de felicidad le iluminaban la cara. Aurora la perdonó, ya que no tenía rencor. 
Aurora y Maléfica quisieron escapar hacia el Páramo para siempre pero todavía Maléfica debía pelear una batalla más. El Rey Estefan llenó el salón principal con guardias que estaban esperándola, con armas y redes hechas de hierro. El hierro quemaba a las hadas y ése era el único punto débil de Maléfica. Tras su ataque, no tuvo más remedio y convirtió a Diaval en un dragón. Ella estaba débil y sus poderes eran inútiles ante la presencia sel hierro. Aurora, en un intento desesperado por ayudarla, encontró las alas que su padre le había robado a Maléfica hacía ya unos años. Con todas sus fuerzas las liberó y ellas se insertaron en Maléfica, com si se volvieran a complementar luego de tanto tiempo. Con todo el poder de sus alas, llevó al Rey Estefan hacia lo más alto de la torre del castillo. Decidida a dejarlo y abandonar la batalla, la atacó con una cadena de hierro y, para consecuencia, Maléfica lo empujó y calló muerto en la entrada del castillo. Todo había terminado. 
De regreso al Páramo, Maléfica se quitó su corona, devolvió la luz y la alegría al Páramo y quitó los muros que había construido. Ante todas las criaturas existentes y también del príncipe Phillip, nombró a Aurora la nueva reina del Páramo.
Y así fue como existió un hada que fue tanto el héroe como la villana, y su nombre era MALÉFICA.


Esta película me enseñó que, alguien a quien creemos diferente, a quien le entregamos nuestro amor, puede cortanos las alas. Ése sentimiento de dolor, de deseo de venganza, de tristeza puede nublarnos la vista y hacernos cometer errores de los que después nos podemos llegar a arrepentir. Estos, pueden perjudicar a personas que son importantes para nosotros y, a veces, no se pueden remediar. Pero si se pueden corregir. Maléfica intentó quitar el hechizo que le había concedido a Aurora, porque entendió que ella no era la culpable de la pérdida de sus alas y de su gran decepción ante el amor. Aurora, al principio, escapó de ella y la acusó de todo el mal en el mundo. Cuando despertó de su sueño, entendió que no había sido su culpa.
A veces la bronca nos hace hacer o decir cosas que no pensamos o que no queremos hacer. Contar un secreto, por ejemplo. El valor del secreto puede significar mucho, pero para alguien que esta ciego al principio no mide el valor de sus consecuencias. En fin, aprendí eso, que no hay que dejar que el odio no controle e intentar, posiblemente, de descargar nuestra parte oscura pero para seguir adelante y no perjudicando a quienes nos aman.  Gracias Maléfica