GYG 027

Dos Meses. Exactamente ese tiempo esperando, hasta que llegó éste momento. Desde la noche anterior no pude dormir. Tenía una mezcla de nervios, emoción, euforia. Mariposas en el estómago. Hace tiempo no me sentía así. Es más, sentía como un cosquilleo en la panza. Me levanté viendo sus mensajes, hablando con él. Estábamos los dos igual de nerviosos. Se hicieron las cuatro de la tarde. Él me pedía opiniones en cuanto a que usar para ser la primera vez. Le dije que el decidiera y que me sorprendiera. Se hacía tarde; yo seguía en mi casa y él en la suya. Ambos llegando impuntuales. No importaba nada. Solo quería estar ahí. 
Ya estaba lista y en camino hacía el cine. Los nervios me aumentaban pero hablar con él me calmaba demasiado. Saqué las entradas y me pidió que lo esperaba en la sala. Mis hermanas se reunieron con sus amigas y yo me quedé sola. Me asomé al balcón del tercer piso del shooping y lo vi por primera vez después de tanto. Ví que se dirigía a la escalera para subir hacia donde estaba. Todavía no me había visto. No sabía que hacer. Fingir sonrisas, disimular nervios. Hacerme la tonta boludeando con el celular. Esperar en un rincón hasta que él se acercase a mí. El ya estaba a medio metro de mí. "Estás hermosa". Escuché que me dijo al oído. Lo saludé con un beso en la mejilla y nos dirigimos a la sala. La función ya había empezado pero... ¿Que importaba?.
Me dejó que eligiera lugar y nos sentamos. Entre tanto hablamos dos o tres palabras sobre la película el pasó su brazo por mi espalda y yo me recosté en su hombro. Podía sentir que mi corazón latía a mil por hora y también el de él. Levanté la vista para verlo y le volví a besar la mejilla. Seguido de eso, el me tomó la cara y me besó. Me sentía como en las nubes. Podía ver como mis nerviosa se iban desvaneciendo de a poco. Fue mágico y hermoso. No tenía esa sensación hace mucho tiempo. Se apartó de mí rostro y me susurró al oído "Te quiero mucho". Le sonreí y muy despacito le dije "Yo también". 
Nos quedamos mirando la película unos diez minutos y cada tanto comentábamos sobre ella. Me atrevo a sigilosamente agarrarlo de la mano. Él me mira y me vuelve a besar. Esta vez no dejé que se detenga. 
Nos decíamos cosas al oído. Él me trataba muy tierno y dulcemente. Me mordía el labio y yo a él. Era como que ya no importaba la película. Nosotros creábamos la nuestra. Los besos en el cuello que hasta hoy puedo recordarlos, me hacían sentir única, segura. Olía su perfume, me sentía complementada con él. Dentro mio una sensación de hermoso placer me invadía. "No quisiera que se acabe éste momento" me dijo "No pienses que se va a acabar. No existe el tiempo ahora" le dije yo. Me permitió que lo besara en el cuello mientras él me acariciaba la cintura. 
Me recosté en su pecho un rato y decidimos mirar la película. Nos reíamos de la suposiciones de como iba a terminar y de los comentarios sobre los pasajeros del vuelo de la misma. me acariciaba el brazo y yo lo tomé de la mano. Me besó en la frente, luego en la mejilla y me robó un beso en los labios. Otra vez, volvimos a nuestra película. No nos importaba nada. Éramos solamente él y yo. Pasó la hora y media de la película y tuvimos que salir. Al ver la luz del shooping noté que sin querer le había dejado una marca en su cuello. Me dijo que no importaba, que con eso me iba a recordar. Me ofreció ir a tomar un café pero al instante le llegó un mensaje de su vieja que ya se tenía que ir. entonces para rematar la situación le agarré la cara con una mano y le dije "Vos no te vas sin saludarme" y lo besé rápido. 
La sensación de felicidad era imposible de disimular en mi rostro. me sentía una chica nueva, reconfortada.
Llegué a mi casa y hablamos toda la noche. Quería que se repitiera mil veces esa tarde. Me iba a ir a dormir, pero él me dijo que esperar que quería mostrarme algo y me pasó un video con una de mis canciones favoritas de Taylor Swift. 
"Quédate tranquila que no estoy enamorado de otra persona y no tengo a nadie mas esperando por mí. Solo te quiero a vos".
Me fui a dormir feliz