No quiero Olvidar

¿Es que me estoy convirtiendo? O peor aún ¿Que me está pasando? 

Me siento en un limbo, todo me da vueltas. Una montaña rusa invade mi cabeza.

Quiero dormir y no despertarme más. Soy una licuadora de sentimientos.

Vamos a empezar por el principio. Esto es lo que siento.

Siento que ya nada tiene sentido para mi. Siento que las personas se alejan de mí y no encuentro un por qué. Siento la necesidad de demostrar que estoy ahí pero involuntariamente parezco invisible. 

Siento que todo lo que soy, nunca va a lograr nada. Estoy dejando ir a lo que más me hace feliz, siento que la música ya no me llena. Siento ganas de golpearme. Siento ganas de caer en un vómito cósmico y vaciarme, verme bien, sentirme bien... aunque me haga mal. Siento ganas de sentir el dolor a flor de piel, para hacerme dar cuenta de que tengo que cambiar y de que aún sigo viva. Siento la necesidad de herirme tanto mental como físicamente. Quiero saber que estoy haciendo mal. ¿Dónde está mi felicidad?

Mi cara de orto no la puedo disimular. 

Abrí mi viejo cofre de recuerdos perdidos y ahí encontré todas esas cartas, esos papeles, esas pulseras; Todos esos lemas de "Nunca te voy a dejar" "Amigos para siempre". 

Ese amor perdido que alguna vez nació en mi... nunca murió. Sigue estando, como el primer día y sigue sin ser correspondido. ¿Para que recordar todo esto? ¿De que me sirve tragar algo haciendo de cuenta que no está vencido? ¿Por que tener ganas de volver? Porque no quiero olvidar.

No quiero olvidar a esa persona, no quiero olvidar esos momentos, no quiero olvidar lo bueno de esos recuerdos porque me hacen feliz. No quiero olvidar los malos, porque me hacen más fuertes. Para eso escribo, para no olvidar